Seamos honestos: bajar de peso no es nada fácil. Comer menos de lo que acostumbras es un cambio difícil. Tener menos opciones a la hora de elegir tus alimentos puede hacerte sentir más hambriento y frustrado. Mantenerse en el plan para bajar de peso, suele ser uno de los desafíos más grandes.
Las tentaciones están por todos lados: en el supermercado, en la casa o, incluso, en el trabajo, y es posible que te sientas abrumado con la idea de una alimentación más verde (en referencia al sistema de color de Noom) y los cambios necesarios para obtener un estilo de vida saludable. Quizás sientas que esos cambios no son para ti y que no es posible sostenerlos a largo plazo.
¡Te entendemos! El cambio a un estilo de vida más saludable puede ser todo un desafío y, como en todo desafío, puede ser muy fácil poner excusas para evitar el esfuerzo que requiere. Y, si bien las recaídas son parte naturales del proceso de pérdida de peso, cuanto más excusas ponemos, más atrasamos nuestro progreso.
Para ayudarte a mantenerte enfocado en tu plan de Noom y que le saques el mayor provecho a tu experiencia, hemos creado una lista con los errores más comunes a la hora de seguir un plan de pérdida de peso.
- Ser deshonesto
Si bien es tentador no registrar esa galleta o puñado de papas fritas que picaste al ir a la cocina, lo cierto es que las calorías de cada alimento suman. Teniendo esto en cuenta, puedes preguntarte: ¿Estoy siguiendo realmente el plan? ¿Mi registro en Noom es totalmente honesto? ¿Registro todo? ¿Estoy registrando lo que consumo los fines de semana y feriados?
- Falta de constancia
Estudios nos muestran que la constancia en la alimentación y en el ejercicio físico es clave no solo para perder peso, sino también para mantenerlo a largo plazo. Los cambios son graduales, así que si cumples un plan ¡seguramente verás la diferencia en algunos meses!
- Comer muy poco
A veces, cuando no vemos cambios en nuestro peso, solemos reducir la cantidad de calorías diarias. Sin embargo, si consumes por debajo de las calorías que tu cuerpo necesita, tu metabolismo se ralentizará haciendo que el peso se estanque nuevamente, ¡o incluso que aumente! Para saber si estás comiendo lo suficiente, utiliza la aplicación Noom, la cual calcula tu ingesta ideal de calorías y se ajusta a medida que pierdes peso. ¡Asegúrate de comer variado: verde, amarillo y naranja!
- No pesarte muy seguido
Sabemos que pesarse puede generar ansiedad, sin embargo el pesarse diario permite aceptar las fluctuaciones normales del peso. Por ejemplo, si de un día a otro pesas dos kilos, no significa que aumentaste de peso en un día, sino que puede deberse a diferentes factores: retención de líquidos o deshidratación, hinchazón natural (especialmente durante la menstruación), la composición de lo que comimos (la sal y carbohidratos hacen que retengamos agua), entre otros. En Noom, recomendamos pesarse a primera hora en la mañana, luego de ir al baño y antes del desayuno, y utilizar la misma balanza/báscula para tener siempre la misma referencia.
- No comer alimentos enteros
Si bien una caloría es una caloría, la calidad de cada caloría varía. Si la mayor parte de tu consumo de calorías provienen de comidas empacadas o procesadas, estás desaprovechando muchos nutrientes que tu cuerpo necesita. Los alimentos enteros, tales como las verduras, frutas y los granos integrales contienen vitaminas y minerales necesarios para el correcto funcionamiento de nuestro cuerpo. Los alimentos enteros pueden mantenerte saciado por más tiempo, mientras que los procesados te hacen sentir hambre con mayor frecuencia debido a que se digieren más rápido. Encontrar un balance en tu consumo de comida procesada y alimentos enteros te ayudará a perder de peso de manera sostenible. 🙂
Si sueles cometer alguno de estos errores a lo largo de tu plan de pérdida de peso, ¡no te preocupes! Reconoce aquello que te desvió y retoma el plan. Revisa tus hábitos alimenticios y piensa en lo que estabas haciendo cuando te sentías bien. ¡Todo volverá a la normalidad pronto!